jueves, 19 de diciembre de 2013

Sobre el derecho a decidir de Cataluña.

   Lo primero: no quiero que Cataluña se independice de el resto de España. De verdad. Si puedo hacer algo por impedirlo, lo haré.
   No obstante:
Hay algo que está por encima de todo. Y se trata de los derechos humanos. Algo básico y fundamental en nuestra civilización.
     De esos derechos humanos se desprende claramente que si una región no quiere estar dentro de un estado, nadie puede obligarla a estar.
     Luego, hay mil cuestiones que pueden plantearse. Pero si la Constitución bloquea totalmente ese posibilidad, es la Constitución lo que está mal y es preciso modificar. Sobre esto no hay ningún género de duda.
     Por supuesto, toda acción tiene consecuencias. Si a consecuencia de ello Cataluña sale de Europa, eso es algo que deberán asumir los catalanes. Seguramente, eso será negativo para ellos mismos y para el resto de España. Pero eso son cuestiones que viene después.
     Lógicamente, el proceso independentista deberá ser razonablemente difícil. No sea que un día el Real Madrid meta una gran goleada al Barça y, sólo por eso, Cataluña quierae independizarse. Sobre todo, el gran requisito sería el de establecer una mayoría cualificada.
     Pero ese cierre total que plantea el Partido Popular no es admisible. Y tampoco eso de que la unidad de España concierne a "todos" los españoles. Si Cataluña ha de ser o no independiente, concierne sólo a los que viven allí.

miércoles, 14 de agosto de 2013

    Puede ser interesante ver alguna de esas tertulias en las que se habla de la actual situación económica (la situación política queda en segundo término) y, lógicamente, de la crisis que estamos sufriendo.
Pero es preciso hacer una observación importante. Se trata de que todas las recetas que se dan para curar la enfermedad de la economía tienen una particularidad importante: en todas ellas se intenta resolver la crisis sin salir del sistema. Cuando es el sistema el que ha creado la crisis. La especulación financiera e inmobiliaria, la tremenda estafa universal.
    Por supuesto, nos interesa, más que la crisis, nuestra crisis. derivada del hecho de que el capitalismo está abandonando los países hasta ahora avanzados, que ya no pueden crecer más (por motivos que no es difícil observar, pero que de momento obvio), para invertir en los que todavía tienen márgenes para crecer. Mientras se mantenga la